Protestas en Chile
El “milagro chileno” choca con la realidad
El coste de la vida, los sueldos, las pensiones y los sistemas de salud y educación se imponen a la mejora del ingreso en el imaginario colectivo del país sudamericano
Eat the rich, cómete a los ricos. Pocas pintadas callejeras son tan elocuentes del momento que atraviesa un país como el grafiti con el que amaneció pintada en las últimas fechas la fachada de un hotel en Santiago de Chile. Un mensaje directo, en inglés – para que nadie, ni dentro ni fuera, pudiera escudarse en la barrera idiomática- y con dos claros destinatarios: las clases acomodadas de una nación que arde en protestas desde hace tres semanas y los turistas y hombres de negocios que visitan la capital en uno de sus periodos más convulsos en mucho tiempo. Chile quiere justicia social y la quiere ya, tras décadas de promesas incumplidas y de, en palabras de la economista del desarrollo Nora Lustig, “un modelo privatizador de los servicios públicos que ha dejado fuera a muchos”. 2019, como rezaba otra de las muchas pintadas callejeras de potente carga política que se han multiplicado en las calles santiaguinas, será recordado como el año en el que “Chile despertó”.
leer mas aqui.