Nora Lustig: 'El mercado no va a crear por sí solo sociedades más equitativas'
Nora Lustig: 'El mercado no va a crear por sí solo sociedades más equitativas'
Profesora de la Universidad de Tulane (EE UU), Nora Lustig es una economista especializada en cómo corregir la desigualdad, reducir la pobreza y fomentar el desarrollo latinoamericano
Nora Lustig (Buenos Aires, 1951) es una de las economistas latinoamericanas más destacadas de la actualidad. Su carrera ha discurrido desde siempre en tres carriles: desarrollo, desigualdad y pobreza, ramas a las que llegó, por simple observación, cuando su familia se mudó a Estados Unidos en la década de los sesenta. ‘Noté un gran salto en el nivel de vida,' explica mientras apura una botella de agua con gas en un hotel del sur de Ciudad de México. Y empezó a hacerse preguntas: ‘Era una época en la que ni mucho menos estaba de moda estudiar la distribución del ingreso. Aún se asociaba la desigualdad a ser comunista o radical de izquierdas. Ya no: se ha gentrificado totalmente, la disciplina se ha transformado y está en todas partes' , explica la profesora de Economía Latinoamericana de la Universidad de Tulane (Nueva Orleans) y presidenta emérita de la Asociación de Economía de América Latina y el Caribe (Lacea).
Pregunta. Que el estudio de la desigualdad haya pasado de disciplina económica de nicho a ocupar un lugar central es una victoria en sí misma.
Respuesta. Es tremendo. Creo que hay dos factores detrás: la caída del muro de Berlín, que acabó con la lucha entre capitalismo y comunismo y rompió tabúes en economía; y la inquietud por el crecimiento de la desigualdad en EE UU. Ya sabemos que, cuando pasa algo en EE UU se vuelve de impacto global… Fue entonces cuando muchos economistas famosos, de tradición neoclásica y no solo marxistas, empezaron a escribir sobre el tema.
P. Y empezó a permear en los organismos multilaterales, algo impensable hasta entonces.
R. Hasta mediados de los noventa, ni siquiera el Banco Mundial mencionaba la palabra desigualdad y el FMI lo veía como un tema de política interna: solo le interesaba la estabilidad. Desde el 2000 se produjo un cambio radical y ahora la palabra desigualdad está ahora continuamente presente. El Fondo también repensó su posición: ahora tienen la conciencia de que es un impedimento para la estabilidad y el crecimiento.